Hoy se acaba, por fin, este caluroso mes de Agosto. Se va acercando el final del verano y antes de que termine, he pensado que os tenía que enseñar mis galletas girasol.
¿No os encantan los girasoles? A mí sí, con ese color, esos prados amarillos que ves cuando vas por la carretera...los veo muy alegres, sencillos...
Más de una vez, volviendo del pueblo de mi padre por una de las múltiples carreteras secundarias de Andalucía, he tenido que parar el coche y recolectar algunos de estos girasoles solitarios que salen en las cunetas. No he podido resistirme... Me los he llevado a casa y los he puesto en un jarrón para alegrar mi sala de estar. Y se mantienen perfectos bastantes días.
Por eso, cuando vi la tarta girasol que había hecho Ingrid (My lovely food) me encantó. Además, puso un tutorial estupendo para explicar cómo la hizo. Desde entonces, se me quedó grabada en la mente que yo haría mi propia versión. Y aquí está.
Esta es la maceta que preparé para regalársela a mi madre por su cumple.
¿Qué cómo las hice?
Pues la masa fue la de Julia, que me da muy buenos resultados.
Las horneé con palito para poner las galletas clavadas en la maceta. Con colorante alimentario Sugarflair (egg yellow/cream) teñí fondant blanco comercial para tener fondant amarillo y naranja. Se me ocurrió utilizar azúcar moreno para toda la corona exterior del círculo naranja. El centro lo marqué con un colador y le hice los puntitos negros con rotulador comestible.
He de decir, que me ha dado muchos quebraderos de cabeza y mucho trabajo. Se debe a mi cortador, que yo creo que viene defectuoso de fábrica. Aquí os pongo una foto.
El dichoso cortador se me desmonta, además es un fastidio a la hora de lavarlo porque la masa se queda incrustada entre los pétalos y tengo que ir limpiándolo uno a uno con un palillo de dientes. Otros cortadores con expulsor que tengo, llevan un muelle en su interior de modo que presionas y cuando lo sueltas, se suelta la masa. Pero éste no lleva muelle y tengo que ir despegando los pétalos uno a uno para soltarlo en la placa.
No sé si hay otros cortadores de gerbera con expulsor. Si conocéis alguno, decídmelo por favor. Contadme vuestra experiencia si habéis utilizado este cortador o si tenéis algún truquito para que sea más sencillo su manejo.
Poner el palito a las galletas también me dio problemas, porque se me soltaron algunas y daban vueltas.
Definitivamente, a menos que quiera hacer flores para ponerlas en una maceta, como en este caso, no pienso volver a pincharle el palito. Es infinitamente mejor utilizar el truco de Bea (El rincón de Bea).
En fin, ya veis mi odisea para hacer estas galletas. En realidad, creo que no me han quedado tan mal después de todo...aunque son mejorables.
Se van acabando las vacaciones, se acerca la vuelta al cole y empezamos una nueva etapa.
Estamos preparando la fiesta de cumpleaños de mi príncipe cuyo tema es: superhéroes. También estoy preparando el reto que me he propuesto... y unas galletas de boda que estoy practicando...
Así que tenemos nuevos proyectos que os iré enseñando y que me hacen mucha ilusión.
No puedo terminar sin agradecer a EPStudio que me haya cedido una de sus preciosas fotos para ilustrar esta entrada.
¡Uuff...! Creo que es la entrada más larga que he puesto hasta ahora. Espero no haberos aburrido.
Me despido hasta la próxima receta que será...¡¡¡TARTA DE QUESO!!!
Hasta pronto.